La canción se ve interrumpida por unos riffs de guitarra sombríos que llegan en el minuto 2:12, tienen el ritmo característico del soft rock, es como si los acordes pudieran contar las historias que no se pueden olvidar, marcando la eterna nostalgia de lo que ya no puede volver. Te recuerda que el mejor consuelo está en la música. Te recomendamos esta canción para esos breaks llenos de reflexión y sanación, ¡te va a marcar la mente!
Reviviendo recuerdos: La emotiva historia tras el single: "Open Field" de Kevin the Persian