En el tema de moldear de nuevo el género synthpop la canción IMMA GET MINE de Brian Walker lo hace de una manera magistral, combinando letras personales, adicionalmente con una producción pulida que suena lista para el escenario principal de cualquier festival. Desde el comienzo, al iniciar el tema, la canción te envuelve en un ritmo vibrante y audaz que parece un guiño a los sintetizadores ochenteros, pero con un toque moderno que lo hace sentir fresco. Es imposible no moverse al compás.
Walker, quien aprendió a tocar el piano a los cinco años y escribe desde un estudio casero en su vieja habitación, entrega aquí algo más que un simple tema: es un manifiesto de autosuficiencia. Su voz clara y emocional te hace sentir como si estuviera narrando sus vivencias directamente a ti. Cuando el tema está en su punto más alto, la canción no solo engancha, sino que se funde contigo al unísono.
IMMA GET MINE es el recordatorio perfecto de que la autenticidad aún tiene un lugar especial en el pop. Es el tipo de música que te motiva a luchar por tus metas, como si Walker estuviera ahí, respaldándote con su energía contagiosa
